En 1848 aparece en La Rioja la primera empresa de conservas vegetales de España. Al finalizar el siglo XIX ya existían más de 40 empresas de este sector en Calahorra dedicadas, especialmente, a la conserva del pimiento morrón dulce y a la pasta de tomate. Hasta la Primera Guerra Mundial las empresas de conservas riojanas lideraron la producción española.
En los años 60 la escasez de hojalata afectó a las empresas de conservas en Calahorra, pero en los años 70 hubo un repunte importante. Actualmente, España es uno de los primeros productores de conservas a nivel mundial y gozamos de reconocimiento internacional.